Habían encendido las luces en “Ibiza Pub”, el boliche de moda en Gobernador Gregores, y la mayoría de los jóvenes se encaminaban bajo los primeros rayos del sol hacia la costanera del Río Chico. Una costumbre de años en el pueblo, luego del baile, que dura hasta el mediodía y que ahora le llaman “after”.

El conductor Mauro Pérez ofreció llevar a Ulises y sus amigos en la caja de atrás de la camioneta.

Según se pudo reconstruir, Ulises Guelet de 19 años salió caminando con su primo Rodrigo Godoy y dos amigos más por la Avenida Cañadón León hacia el “after”. Habían hecho unas cuadras cuando una camioneta con dos personas, se detuvo y el conductor, Mauro Pérez, habría ofrecido a llevarlos en la caja.

Los cuatro aceptaron el “aventón” y se subieron. No pensaron que esas 10 cuadras a esa hora con poco tránsito fuera a resultar peligroso. Sin embargo, Pérez aceleró más de la cuenta y cruzó a toda velocidad la Ruta 25, que cruza por el centro a la ciudad, mientras los jóvenes atrás golpeaban intensamente el techo y el parabrisas de la cabina para que se detenga. El conductor nunca les hizo caso y luego de atravesar unas 6 o 7 cuadras, perdió el control de la Toyota Hilux, y dio varios tumbos por el suelo hasta chochar contra un poste de luz en la Avenida Cañadón León, entre las calles Santiago del Estero y Tránsito Pesado.

Los cuatro jóvenes que venían atrás salieron despedidos como rayos y quedaron tendidos en el suelo. Uno se luxó el codo, otro recibió un duro golpe en la cabeza pero quien resultó con menor suerte fue Ulises Guelet, que quedó con fracturas múltiples de cráneo faciales y en estado crítico. “A partir de allí comenzó nuestra pesadilla”, contaron a La Opinión Austral los familiares de Ulises y de Rodrigo. Todos fueron trasladados en el hospital local, pero luego de estabilizarlo, al mediodía lo trasladaron el Hospital de San Julián, de mayor complejidad. Estaba grave.

En el Hospital Miguel Lombardich intentaron salvarlo pero luego de cuatro días internado en terapia intensiva, el martes 29 de noviembre, falleció.

La familia está destruida. Y para colmo, el rumor en el pueblo era que el conductor se había retirado del hospital sin lesiones graves y sin recibir el alta médica.

La Opinión Austral pudo saber que este jueves realizaron la autopsia sobre el cuerpo de Ulises y que sus restos fueron trasladados a Lago Posadas, de donde es oriundo, para darle el último adiós.

Su madre, junto con dos familiares de los otros jóvenes radicaron una denuncia penal contra Pérez, que manejó la camioneta en estado de ebriedad. Según confirmó La Opinión Austral, el conductor fijó domicilio y está a disposición de la Justicia.

Esa noche de jueves, Ulises se iba a volver a Lago Posadas. Había viajado a Gregores para “llevar unas cosas” y como tiene familia allí había decidido con su primo aprovechar para salir a bailar. En la ciudad era conocido. había estudiado de adolescente en la Escuela Agropecuaria y se había hecho conocido por su habilidad con la pelota en el Club Sportivo Huracan, desde donde llegó a viajar a jugar por la Copa Cataluña, en España, un “mundialito de fútbol” en 2017, junto con su amigo Giovani, quien se dislocó el codo en el accidente.

 

Desde el club de Gobernador Gregores enviaron las condolencias a la familia Guelet – Sepulveda por la pérdida. “Vuela alto Ulises Guelet. siempre estarás en nuestros corazones”, dijeron desde Sportivo Huracán.

Leé más notas de La Opinión Austral