Un violento hecho en una zona de asentamientos de la localidad de Comodoro Rivadavia dejó a un policía herido con arma de fuego, un delincuente también baleado e internado en grave estado y a una mujer embarazada de 8 meses, con sus tres hijos menores y su pareja, en la calle, debido a que le incendiaron la casa que había comprado hacía pocas semanas.

Esto ocurrió en horas de la tarde del miércoles pasado, entre los barrios San Cayetano y Máximo Abásolo. Ese lugar es una de las tantas zonas de asentamientos ilegales que hay en la ciudad del petróleo, donde las ocupaciones y las construcciones son absolutamente irregulares y constantemente hay enfrentamientos entre familias que se adueñan de los terrenos y los venden.

El televisor que intentó robar Triviño. FOTO: DIARIO CRÓNICA

Gisela Casarosa (25), la mujer embarazada de término, compró una casa de ese lugar, ubicada cerca de calle Uno y Héctor Cámpora, hace pocas semanas y se mudó inmediatamente junto a su pareja y sus tres hijos de 1, 7 y 8 años. A los pocos días, apareció un hombre armado que se llama Martín Triviño (26), quien los amenazó de muerte y les exigió que se retiren, ya que era propietario del terreno. “Estaba muy drogado y violento, nos dio mucho miedo porque vino armado”, dijo la mujer en diálogo con Diario Crónica.

Les incendió la casa

Anteayer, Triviño fue nuevamente a la vivienda de la familia, pero con una carga de violencia distinta y decidido a dañar a la familia. “Ingresó a la vivienda forzando el portón, rompió la puerta y me apuntó con un arma, fue derecho a la habitación donde dormía mi bebé de 1 año y siete meses”, comentó la joven, fuertemente conmovida por perder todas las cosas que tenía con su familia.
El fin de semana pasado, el delincuente también había ingresado tras dañar la puerta trasera. En esa ocasión, Casarosa contó: “Me amenazó a mí y a mis tres hijos, yo estaba en mi habitación. Me robó el celular que tenía en la mano, me pedía que desenchufe el tele, me pedía plata y yo le decía que por favor no, y mis hijos llorando le decían que no saque nada porque era el tele de ellos”, recordó angustiada.

Lo denuncié, yo busqué ayuda y pedí que lo detengan, pero seguía libre

En esta ocasión, el malviviente que está internado en estado grave, “empezó a cargar el arma, me pedía que me vaya, que se iba a volver loco y que me iba a pegar un tiro en la cabeza si no me iba. Agarré a mi nena, salí sin zapatillas ni nada, me fui a la casa de mi vecino, llamé a la Policía pero enseguida me prendió fuego toda la casa”, contó. Y agregó: “Este tipo nos arruinó la vida, entró con mucha violencia”.

Cargó el arma y me apuntó en la cabeza, que me vaya de ahí o me iba a matar

Los otros dos nenes, de 7 y 8 años, seguían dentro de la vivienda y la mujer tuvo que entrar a rescatarlos. Y, mientras la adrenalina por salvar lo poco que tiene la apuraba, llamó a la Policía y a los Bomberos, pero cuando la ayuda llegó “ya estaba todo prendido fuego”. “Vivo con impotencia a que nos haga algo, las dos veces que vino estaba drogado” añadió, y dijo que la semana pasada hizo la denuncia, buscó ayuda, pero Triviño seguía libre.

Dos heridos

En el lugar había una consigna policial del personal de la División Policial de Investigaciones, por otro hecho delictivo que había ocurrido en una farmacia. En un momento, los efectivos policiales notaron que había movimiento en la vivienda y que intentaban sacar cosas de su interior, de modo que intervinieron para detenerlos y es allí cuando comenzaron los disparos que terminan con el sospechoso y el policía herido.

Policías y vecinos en el lugar de los disparos. FOTO: DIARIO CRÓNICA

Los policías quisieron demorar a Triviño, pero éste sacó el arma y comenzó a disparar hacia ellos, iniciando un tiroteo. Según indicó Diario Crónica, uno de los disparos hirió en un brazo a un efectivo de la policía y al menos otros dos impactos dieron en Triviño, uno de ellos en el estómago, por lo que está internado en estado grave.

Leé más notas de La Opinión Zona Norte