El Museo de Informática de la UNPA-UARG, junto al Patio Om, llevó adelante un taller artístico de reciclaje en el que los y las participantes trabajaron en la reutilización de materiales y la elaboración de un producto.

Al respecto, Osiris Sofía, director del Museo de Informática, comentó a La Opinión Austral: “La idea de trabajar en distintos frentes es parte del proyecto ‘Transformática’, uno de los frentes más importantes es recuperar el equipamiento para poder entregarlo a quienes no tienen, pero también en la idea del cierre de la brecha digital está pensar, repensar y reflexionar qué pasa cuándo uno usa una computadora dos o tres años y después la tira”.

Con la actividad se buscó concientizar sobre los residuos electrónicos. Foto: José Silva/La Opinión Austral

“Puede ser que un equipo se queme y no hay manera de reacondicionarlo”, continuó diciendo y agregó “¿qué pasa con esos residuos y con ese efecto que tienen en la vida de la comunidad, en el medioambiente? En este contexto estamos trabajando junto a Patio Om, a través de la realización de obras de arte”.

Durante la actividad, que tuvo lugar el viernes pasado, se expuso la obra escultórica “El árbol”, una intervención artística elaborada con desechos electrónicos en su interior, compactada y contenida con plástico pet y recubierta con bolsas de polietileno termofundido.

La obra “El árbol”. Foto: José Silva/La Opinión Austral

Además, comentó Silvana Torres, de Patio Om, “decidimos hacer una máscara de polietileno para fundir, fundirnos nosotros y proponerle a cada persona ser parte de esa obra que va a viajar 4 mil años al futuro. Esto tiene que ver con la parte lúdica y performática de ser parte de la obra”.

“Hubo gente que se sacó fotos con las obras y también sumaron sus mensajes, cartas o dibujos, que van a ir encapsulados a 4 mil años, que va a ser lo que perduren las obras que trajimos para compartir en la universidad”, indicó respecto a “El árbol”.

“Con la actividad queríamos concientizar que cada vez que cambiamos un celular, un electrodoméstico, estamos contribuyendo a las toneladas de basura electrónica que hay en el mundo, que va creciendo día a día por las prácticas del consumo y van a perdurar en la tierra así tal como están durante 4 mil años”, cerró.

 

(Foto principal: José Silva/La Opinión Austral)

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