El próximo martes 9, el gobierno publicará los nuevos valores de tarifas para los servicios tanto de gas, energía eléctrica y agua corriente. Todo bajo un esquema el cual según señalan fuentes oficiales: “tendrá en cuenta la progresividad y las diferencias por zona“, respetando las respectivas particularidades correspondientes a cada región.

Aquellas mismas fuentes también hicieron referencia a la incorporación del sistema de segmentación de criterio de progresividad de consumo. “La semana que viene se va a definir la letra chica del anuncio”.

Con el nuevo esquema se buscará sostener la tarifa vigente a aquellos que cuenten con un nivel de ingresos bajos o medios. Eso sí, aquellos casos en los cuales el consumo exceda los 400kwh no será subsidiado. Se estipuló ese tope ya que se precisaron datos en los cuales se mostraba que es un nivel de consumo “que representa el 80% de los usuarios, aunque solo el 50% del consumo total residencial. Sin embargo, no se señaló si el tope se corresponderá de manera bimestral o mensual.

400kwh es el tope de consumo establecido

Sergio Massa declaró en conferencia de prensa, posteriormente a asumir que el nuevo esquema de segmentación por consumo no regirá únicamente para aquellos usuarios residenciales de energía eléctrica y gas natural por red. También incluirá a aquellos de agua corriente.

Los tres servicios presentarán diferencias tanto en medición del consumo como de jurisdicciones en el área de distribución en energía eléctrica y agua corriente, Esto se debe a que el Estado nacional cuenta con competencia sobre las operadoras del AMBA (Edesur y Edenor por el lado de energía, mientras que AySA correspondiente al agua). En cambio, en gas natural se abarcará la totalidad del territorio nacional.

Un dato importante es que la mayoría de los usuarios residenciales de agua corriente no tiene servicio medido. Simplemente se les aplica una suma fija, contrariamente a lo que sucede con el gas y la electricidad.

Las tarifas de electricidad y gas se ajustaron teniendo en cuenta las diferentes proporciones otorgadas por el Coeficiente de Variación Salarial del año pasado. (40% para los usuarios de nivel 2 y 80% para aquellos de nivel 3). Además, se aprobó un incremento del 32% para AySA, correspondiente a todo el año. Segmentado en dos etapas (20% en julio y 10% acumulativo en octubre).

Los entes reguladores de la electricidad y del gas (ENRE y EnarGas, respectivamente) dependerán del Ministerio de Economía, mientras que AySA se encuentra en la órbita del Ente Regulador de Agua y Saneamiento (ERAS) ligado al Ministerio de Obras Públicas.

Se indicó que, en el caso de AySA, el proceso de segmentación comenzará en el mes de septiembre. Por el lado del gas “la quita de subsidios seguirá la misma lógica” que la energía eléctrica, pero “partiendo de las diferencias climáticas y costo de distribución”. Aunque respetando siempre la estacionalidad de diversas regiones de nuestro país.

Otro interrogante que subsiste es si la quita del subsidio a los consumos que excedan los 400kwh se aplicará de manera gradual o de una única vez. Se aclaró que “no es lo mismo utilizar 400kwh en Capital Federal y Gran Buenos Aires, que, en el noreste del país, donde se cocina con electricidad”.

Gabriela Cerruti, portavoz de la Presidencia, declaró el jueves que de los nueve millones de hogares que solicitaron mantener subsidios de luz y gas, gastan menos del tope establecido por mes, por ende, podrán mantenerlo. “Del 20% restante no esperamos que paguen más tarifas, sino que reduzcan un poco sus gastos” sentenció la funcionaria.

El nuevo esquema buscará, además de realizar un ahorro de subsidios por vía tarifaria, un aumento en el ahorro de la energía. Más aun teniendo presente que una parte del combustible consumido es importado, cuyo precio se disparó debido al creciente conflicto bélico entre Rusia y Ucrania.

La portavoz Presidencial señaló que la idea es “reducir el consumo energético”

“Casi cuatro millones de hogares argentinos no solicitaron utilizar los subsidios” señalo el recientemente asumido Sergio Massa en conferencia.” Entre los más de nueve millones de hogares que sí pidieron mantener el subsidio, vamos a promover el ahorro por consumo”, para posteriormente aclarar que la decisión fue tomada “no solamente por economía de cuentas públicas, sino también por progresividad del sistema y eficiencia del uso de los recursos”. “Ni podemos seguir con un esquema en el que quien más gasta la energía y agua, es quien más subsidios recibe”.

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